martes, 12 de febrero de 2013

Plastilina casera no tóxica

Hace un par de semanas le regalaron a Mateo un kit para jugar con plastilina, está genial porque trae varios instrumentos para hacer diferentes formas, un rodillo, moldes, etc. y cuatro botecitos con plastilina, la cual duró muy poco porque, además de que era una pequeña cantidad, los ha usado día tras día y no siempre hemos tenido el cuidado de guardarla a tiempo por lo que se secó y ya no está apta para usarse. 

El siguiente paso era hacer nosotros la plastilina. Alguna vez lo intentamos con una receta que me encontré pero no tuvo muy buen resultado. Buscando de nuevo algo que funcionara mejor me topé con esta receta que es básicamente la misma que probé la vez anterior pero con la diferencia de que hay que cocinarla (en la anterior se mezclaba todo y se amasaba en frío), para mi sorpresa este detalle hizo toda la diferencia, obtuvimos una plastilina de gran calidad y que no le pide nada a la Play-Doh, por ejemplo.


En el enlace se encuentra la receta completa y muy bien explicada así que les invito a pasarse por ahí; al final del artículo se dan algunas muy buenas ideas de cómo jugar con plastilina. 

Una aportación mía: entre los ingredientes se encuentra el cremor tártaro (ácido tartárico o bitartrato de potasio), una sustancia muy usada en pastelería para impedir que el azúcar se cristalice, para aumentar el volumen de alguna masa o para estabilizar las claras de huevo, pero yo no tenía manera ni humor de salir a buscar tal sustancia así que entre las páginas que visité para averiguar más sobre el cremor tártaro leí que en las preparaciones pasteleras puede ser sustituido por bicarbonato de sodio o con polvo para hornear y que, precisamente, éste último es una mezcla de bicarbonato y cremor tártaro, entonces sustituí el cremor tártaro por polvo para hornear y obtuvimos un muy buen resultado. Al poner la mezcla al fuego se pega un poco a la olla pero es muy fácil de quitar al lavarla si previamente la ponemos un rato a remojar.

Ojalá lo intenten y la pasen también como nosotros.